El sábado fue la Noche Blanca en Oviedo y quisimos aprovechar la ocasión para volver a entrar en la Fábrica de Armas. Allí nos encontramos con la instalación Western Flag, de John Gerrard, que toma como punto de partida el lugar donde se ubicó el primer pozo de petróleo de los Estados Unidos (Spindletop, Texas) para realizar una reflexión sobre nuestra época. Además, también asistimos a Comando Psicográfico, la performance de Pablo Gallo y Iago Alvite en la que el primero dibuja a ciegas mientras suena la música experimental del segundo.
De allí nos fuimos directos al Parking El Carbonero para ver el tercer pase de La Imagen Sonora, una instalación audiovisual inmersiva producida y coordinada por Javier Bejarano. Habíamos estado en la zona del parking pero no en la parte superior, donde antiguamente se ubicaban las taquillas y la sala de espera de la estación… Y la verdad es que nos sorprendió mucho el espacio por el aura y la energía de otro tiempo que aún conserva. Algo tuvo que ver, desde luego, la escenografía creada por Nano Méndez para la ocasión. Una vez dentro, nos sumergimos en un universo onírico formado por tres cortometrajes de Reynold Reynolds, proyecciones de Rubén Rayán y sonido de Jorge Cueto, todo ello con la interpretación en directo de Verónica R. Galány Javier Bejarano.
Un año más, una Noche Blanca cargada con una gran variedad de actividades culturales y artísticas… Tantas, que a veces nos cuesta elegir y entonces priorizamos ver a los/as amigos/as y, por supuesto, siempre acudimos a la Fábrica de la Vega para disfrutar de ese maravilloso espacio que el resto del año (y el 100% de su terreno) está totalmente desaprovechado.
